La primera semana del Dakar ha concluido tras la disputa del prólogo y las primeras seis etapas. Los corredores españoles vivirán la jornada de descanso con la esperanza de que la segunda parte de la prueba esté llena de buenos resultados que permitan mejorar los puestos que ocupan actualmente en la general. Lorenzo Santolino sigue mostrando una gran regularidad y sale indemne de la complicada etapa de hoy. Joan Barreda lucha contra el dolor provocado por una fisura en la clavícula izquierda tras la caída de ayer. Laia Sanz y Cristina Gutiérrez cierran semana con una gran actuación.
Lorenzo Santolino ha salvado otro día más la etapa sin fallos importantes, más allá de un pequeño error de navegación en el kilómetro 51. Esto es relevante en días como hoy, donde sobrevivir a la competición es un éxito: «He salido cauto. La moto se movía muchísimo, he intentado ir paralelo a las trazas para intentar salirme de las roderas de los coches. En el primer ‘refueling’ del kilómetro 101 han parado la etapa. La verdad es que está muy peligroso. Hay muchísimas zonas con piedra que los coches han dejado muy destruidas. Además, se rueda a una velocidad media o media/alta y en un terreno tan roto, el quedarte encima de la moto es una lotería. Sobre todo, cuando hay zonas un poco blandas, sin llegar a ser arenosas, que los coches van a buscar las zonas duras, y aunque parezcan roderas blandas, en realidad estás viendo la arena, pero debajo están todas las rocas y escalones duros. Es súper peligroso».
Joan Barreda ha sufrido hoy sobre la moto. La lesión provocada por la caída de ayer, una fisura en la clavícula izquierda, le provoca mucho dolor. Ahora el objetivo no es otro que acabar la carrera: «El objetivo hoy era intentar continuar en carrera después de la caída de ayer. Con bastante dolor durante estos 100 kilómetros, especialmente en las partes de piedras y de arena, donde había que frenar para pasar los baches. He sufrido bastante. Vamos a ir viendo cómo evoluciona la lesión. El objetivo es que no empeore. Si sigue así, espero poder manejar la situación para continuar en carrera. La carrera se complica desde que cometimos el error el primer día, porque luego intentas apretar para recuperar tiempo y al final llega la caída y la mala suerte de lastimarme el hombro. Ahora vamos a intentar llegar a meta. Hoy he podido acabar los primeros 100 kilómetros, pero no sé si continuar la etapa hubiera sido factible. Me dolía mucho el hombro en algunos movimientos encima de la moto».
Sandra Gómez continúa progresando en su primera participación en el Rally Dakar. La piloto madrileña no estaba nada contenta con la neutralización de la carrera, a su juicio innecesaria, ya que eso limita la posibilidad de recortar distancias: «Nos han vuelto a cortar la carrera, dicen que es peligroso. No entiendo nada, no sé dónde está el peligro. Si venimos por una pista en la que había muchas piedras, destrozada por el paso de coche y camiones de ayer, pero creo que cada uno debería poner su límite de velocidad. Lo único que pasaba es que no se podía ir a 200 km/h, sino que había que ir a 150. En mi opinión, claro que se podía hacer la especial, pero es que van muy deprisa, y habrá que ir más despacio. Hoy teníamos 400 km de especial, sólo hemos hecho 100. Estoy un poco enfadada, la verdad. Hasta el momento, ya puedo asegurar que no es la carrera más dura del mundo, y veo que a la mínima que hay algo que no les cuadra, cancela la organización. La verdad es que hay un ambiente un poquito extraño».
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Nani Roma ha completado una positiva jornada entre los mejores del día. Ejercicio perfecto sobre el BRX Hunter T1+ para recuperar el ritmo: «Fue bueno para ser honesto. No hemos tenido errores porque hemos pilotado de forma segura a través de las áreas rocosas, evitando así los pinchazos. Estamos mejorando constantemente el coche, pero es muy agradable de conducir. Realmente tomamos una buena velocidad a lo largo de la etapa, pero tenemos la segunda semana por delante y será mucho más difícil que la primera, ya que ahora conoces parte del terreno. No será fácil para nadie, pero estamos confiados de poder hacerlo bien».
Laia Sanz ha brillado en la sexta etapa de este Dakar. Su gran actuación en la jornada de hoy, acabando a 15 minutos y 42 segundos del primer vencedor de la especial, le permite escalar hasta el puesto 26 de la clasificación general: «Llevábamos ritmo para acabar 15º o 16º, pero hacia el final hemos desllantado una rueda y hemos tardado un poco más de la cuenta en arrancar por los problemas que estamos arrastrando todos los días con el elevador hidráulico. Aun así, estoy contenta y muy satisfecha. Ha sido un muy buen día. Hay mucha diferencia entre poder salir en el puesto 31, como ha sido el caso de hoy, o hacerlo en el 112. Hemos tenido incluso algo de polvo, pero hemos disfrutado de la etapa y hemos llevado un buen ritmo todo el día. Maurizio Gerini ha navegado muy bien».
Carlos Sainz ha vuelto a sufrir en la sexta etapa. El punto débil del Audi RS Q e-tron sigue dando problemas al piloto madrileño. En esta ocasión, el ‘Matador’ ha cedido más de media hora por culpa del amortiguador: «Otra vez hemos sufrido un retraso por problemas mecánicos. Antes del control de paso del kilómetro 81 hemos sufrido un problema con un amortiguador. Más adelante una rueda nos ha obligado a parar y reparar. Como ya pasó en la jornada de ayer, Stéphane Peterhansel se ha parado a ayudarnos. Tengo que agradecer una vez más a Stéphane su ayuda, nos ha salvado hoy».
Cristina Gutiérrez ha sido otra de nuestras mejores representantes en esta jornada, al cerrar una magnifica actuación en la categoría de T3. Ha acabado la especial en segunda posición y completa el podio provisional de la clasificación general: «¡Estamos muy contentos con el rendimiento del coche! Debemos agradecerlo a nuestros supermecánicos, que trabajaron sin descanso para dejarme el coche listo para la etapa. Ha sido la etapa que necesitábamos, sólo hemos tenido que ocuparnos de correr. Tuvimos algún problema de navegación y perdimos unos diez minutos. Pese a todo estamos contentos, porque seguimos en la lucha por el podio».
