Elfyn Evans estaba en disposición de terminar el Rally de Montecarlo en posiciones de podio, pero una salida de pista echó por tierra su trabajo. Pese a todo, el piloto galés demostró que el rendimiento de Sébastien Ogier con el Toyota GR Yaris Rally1 no era una cuestión del talento del francés. El ‘Rally1’ japonés ha nacido con buenos mimbres y no sólo por el segundo puesto final de Ogier o el cuarto de Rovanperä, sino por los destellos que tuvo el propio Evans a lo largo del ‘Monte’.
El galés Elfyn Evans tenía todo en su mano para subir al podio, pero un error de pilotaje acabó con el Toyota GR Yaris Rally1 del dos veces subcampeón del WRC fuera de pista en el SS11. El trabajo de los aficionados devolvió el coche a pista, pero con un tiempo perdido que impidió a Evans entrar entre los diez primeros. Por ese motivo, el único botín de Evans al final del Rally de Montecarlo consistió en los cuatro puntos que sumó en el Power Stage. Renta escasa para las buenas sensaciones cosechadas.
De hecho, Elfyn Evans se ha mostrado satisfecho con el rendimiento del Toyota GR Yaris Rally1: «Diría que tenía un coche para desafiar a los líderes en el Rally de Montecarlo. Creo que es algo que puedo hacerlo durante el año. Es cierto que hay muchos rallies que son muy específicos y es difícil saber cómo nos irá allí, pero el coche tiene los ingredientes para ser competitivo. Los muchachos han hecho un muy buen trabajo. Siempre es difícil porque los test no son muy extensos, pero me he encontrado mejor de lo esperado».
En esta línea, el piloto galés añade: «Para ser honesto me he encontrado mucho más feliz con el coche durante el Rally de Montecarlo de lo que lo había estado en las pruebas. Esto es gracias a todo el equipo porque se han esforzado mucho en darme un mejor coche. Todos los coches terminamos sin ningún problema mecánico, por lo que es una gran marca en la casilla de salida y tengo que dar las gracias a todos los chicos del equipo. El sistema híbrido funciona bastante bien, aunque quizá no lo aproveché del todo».
Casi sin descanso, Elfyn Evans ya ha comenzado a preparar el Rally de Suecia, segunda cita de la temporada en el WRC. La prueba escandinava es la única del calendario que se disputa sobre nieve y hielo, por lo que supone un desafío muy específico para pilotos y copilotos, así como para el propio coche. Pese a todo, Evans espera lograr un buen resultado en Suecia que le permita engancharse a los puestos de cabeza.
