Los prototipos del nuevo Mercedes-AMG GT ya están rodando, un nuevo deportivo que todavía tardara un poco en llegar. Prácticamente al mismo tiempo, la producción del Mercedes-AMG GT Black Series se ha terminado, un broche de oro perfecto con récord en Nürburgring incluido.
Muchos no creían en las posibilidades de que Mercedes volviese a utilizar un apellido comercial propio de las versiones más extremas, adelantándolo en exclusiva mucho antes de que la estrella lo hiciese. El Mercedes-AMG GT Black Series llegó pero no para quedarse eternamente, sino solo durante un año. Este es el tiempo que ha permanecido en producción, y que ya ha llegado a su fin.
Homologado para calle pero con unas especificaciones de competición, el AMG GT más extremo sorprendió por llevar al límite la potencia del motor V8 de 4.0 litros biturbo sin necesidad de asistencia eléctrica, pero con un trabajo aerodinámico por detrás realmente único. Los técnicos de Mercedes-AMG trabajaron en una puesta a punto para no dejar un solo resquicio a sus rivales más directos.
El Mercedes-AMG GT Black Series ha puesto el listón muy alto a su sucesor
La firma alemana, y la casa de Affalterbach, no han escatimado en absoluto en este auténtico superdeportivo que, en lugar de seguir a la venta, ha decidido decir adiós y así ofrecer un plus de exclusividad a sus propietarios. Un caché que se cotizará muy alto, más que la fibra de carbono y los materiales ligeros que se encuentran bajo la carrocería.
Y un extra más, no menos importante, el de lucir una insignia en el circuito de Nürburgring como uno de los modelos más rápidos de su categoría. Mercedes no ha hecho gala de este trofeo, pero fuentes alemanas han desvelado que el alemán estableció un récord de 6 minutos y 53 segundos, superando por cinco segundos al Porsche 911 GT2 RS, y quedando cerca del logrado por el Lamborghini Aventador SVJ, que paró el cronómetro en un tiempo de 6 minutos y 43 segundos en un trazado -el Nordschleife- de poco más de 20 kilómetros de longitud.
Una «espinita» clavada que no pudieron conseguir los 730 CV de su imponente motor V8 de 4.0 litros biturbo, pero que a buen seguro alcanzará su sucesor dentro de unos años. La nueva generación del Mercedes-AMG GT ya está en desarrollo, y esta sí que hará uso de la tecnología electrificada «AMG E Performance». Aunque no es de la misma categoría, a Mercedes le servirá el récord que marque el AMG ONE. El caso es siempre quedar por encima.
