Debido a las considerables restricciones de los equipos para hacer pruebas durante la temporada, ha habido que esperar bastante para tener en acción al vigente campeón de IndyCar. Álex Palou no se había subido al #10 de Ganassi en una sesión representativa desde que conquistó el título el pasado 26 de septiembre en Long Beach, y ayer inició en Sebring el camino hacia la defensa de su estatus, que arrancará formalmente en apenas nueve días con los primeros entrenamientos libres del Gran Premio de St. Petersburg.
Estrenando su nueva decoración principal para 2022, ligeramente modificada con el añadido de unas estilosas lineas ‘racing’ blancas, Palou se enfrentó a la segunda jornada de test privados en el circuito club de Sebring, un día más tarde de lo inicialmente previsto por un cambio de planes en Chip Ganassi Racing. Con 138 vueltas a sus espaldas, el español de 24 años terminó en séptima posición entre los 14 participantes, con un mejor tiempo de 52.325 segundos, a dos décimas de la cabeza y a solo ocho milésimas de su compañero Scott Dixon. Su crono fue registrado por la mañana, donde Palou fue el tercero más veloz, obteniendo por la tarde un mejor tiempo algo más lento en la misma décima.
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En una jornada en el que las fuertes rachas de viento y la mayor suciedad en pista restaron unas pocas décimas respecto al lunes, los dos mejores tiempos corrieron a cargo de Meyer Shank Racing en las horas finales. Su nueva adquisición, Simon Pagenaud, terminó cuarto en la sesión matutina antes de hacerse por la tarde con el primer puesto gracias a un tiempo de 52.113, con el que batió por 81 milésimas a su compañero Hélio Castroneves. Pagenaud montó gomas nuevas para marcar este crono, pero el francés aseguró no haber hecho uso del push-to-pass durante su vuelta.
Antes del ataque doble de los Shank, el mejor tiempo lo había marcado Marcus Ericsson, el más veloz de los cuatro coches de Ganassi, escoltado en la tabla de tiempos por el neerlandés Rinus VeeKay en una de las unidades de Ed Carpenter Racing. Por segundo día consecutivo, el novato Kyle Kirkwood volvió a hacerse notar en el #14 de A. J. Foyt Racing al conseguir el mejor tiempo en la sesión de la mañana por delante de Dixon y Palou, y volvió a acabar por encima de ambos con el quinto mejor registro vespertino, el mismo que ocupó en la tabla absoluta del día.
En su segundo día consecutivo en pista, Callum Ilott y David Malukas lograron mantenerse todo el día entre los 10 primeros, esta vez con el británico de Juncos por delante en ambas sesiones. No fue el caso en ningún momento para Takuma Sato, que tuvo un desempeño discreto en su primera toma de contacto como piloto del #51 de Dale Coyne Racing, aunque sí logró batir a Jimmie Johnson, Dalton Kellett y Tatiana Calderón, los tres grandes candidatos al «farolillo rojo» de la temporada.
A priori, IndyCar afronta esta temporada con la parrilla más estable de su historia, ya que solo Calderón no disputará todas las carreras al ceder su puesto en óvalos. En conjunto, los 26 pilotos que formarán parte de la práctica totalidad de la temporada han tenido la oportunidad estos dos días de quitarse algo de óxido para el inicio más madrugador en casi dos décadas, aunque con un calendario muy espaciado hasta mayo que dará pábulo a los importantes test híbridos a partir del mes próximo.
RESULTADOS DEL SEGUNDO DÍA DE TEST EN SEBRING
(R): Novatos en IndyCar (tres carreras o menos)
