Hace un año, Sam Sunderland cerraba el podio de la categoría de motos del Dakar 2021. Pese a los esfuerzos de británico, Honda reafirmaba su adquirido dominio en el rally-raid más duro del mundo y conseguía su segunda victoria consecutiva con un doblete liderado por el ‘motard’ argentino Kevin Benavides y completado por Ricky Brabec, ganador en 2020. Sunderland era el mejor piloto KTM y a la vez el primer derrotado, aunque en esos momentos no podía imaginar que el ‘Touareg’ de Kevin Benavides iba a permitirle está más cerca que nunca de su segundo Dakar tras el logrado en 2017 junto a KTM.
De hecho, los acontecimientos tras el final de la 43.ª edición del Dakar se desarrollaron casi en tiempo récord. En los primeros días de febrero, Kevin Benavides confirmaba que su renovación con Honda estaba estancada y que valoraba otras opciones. Ya en marzo se daba por seguro su fichaje por KTM, movimiento que se confirmaba en abril. En ese momento, KTM contaba en su equipo oficial con Sam Sunderland, Matthias Walkner y Toby Price, además del recién llegado Kevin Benavides. Y en las cuentas de la firma austriaca sobraba un piloto, siendo Sunderland el ‘desterrado’. Sam pasaba a defender los colores de GasGas en noviembre.
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Este movimiento para hacer hueco a Kevin Benavides en el equipo oficial de KTM dejaba a Sam como líder del proyecto de GasGas, firma española bajo el paraguas de KTM. Pocos entonces podían colocar en las quinielas del ‘Touareg’ al ‘motard’ británico, menos aún a su compañero Daniel Sanders. Sin embargo, el inicio de Dakar de ambos no podía ser mejor. Sanders lograba la victoria en el prólogo y en la primera etapa. Además, el australiano se anotaba también la victoria parcial en la sexta especial, si bien su rally terminaba poco después. Mientras tanto, Sunderland se movía entre los mejores con afinada regularidad.
Tras la primera semana de carrera quedaba claro que Sunderland y GasGas iban muy en serio. De hecho, el británico conseguía liderar el rally entre la segunda y la sexta etapa. Pese a perder brevemente el liderato en la séptima especial, en el que fue su peor día en términos de resultados, Sunderland recuperaba de nuevo la primera plaza en la octava etapa con su única victoria parcial de la edición. Le tocaba sufrir en los dos siguientes días, aunque el piloto de GasGas conseguía la posición de salida perfecta para dar el golpe definitivo al Dakar en la undécima especial.
Sam Sunderland tiene ahora su segundo ‘Touareg’ y KTM la certeza de haberse equivocado. Si bien es difícil decir si Sam hubiera ganado el Dakar en la estructura oficial de la marca austriaca este año, lo que sí está claro es que el triunfo de Sunderland deja en mal lugar al fabricante de Mattighofen, ya que la capacidad para tener cuatro pilotos en el equipo oficial, como además tiene Honda, está ahí. Mientras tanto, la firma catalana GasGas celebra su primer Dakar, incluso si poco queda de la marca original ahora que es una ‘filial’ más de KTM. Pese a todo, el triunfo de Sunderland tiene notas de un cante español.
