Carlos Sainz y Charles Leclerc, conjuntamente con el resto del equipo Ferrari, presentarán al mundo su nuevo monoplaza para 2022 el próximo 17 de febrero, un mes antes del inicio de la temporada.
La Scuderia Ferrari ha sido la segunda en confirmar la fecha en la que presentará su nuevo monoplaza, el que debe llevar a los italianos de vuelta a los puestos de cabeza. Será el próximo 17 de febrero y, aunque aún no se han dado detalles, se espera que dicho evento sea retransmitido desde Maranello a todo el mundo vía online.
En esta importante presentación, Carlos Sainz y Charles Leclerc desvelarán el monoplaza resultante de la llegada del nuevo reglamento técnico, que ha obligado a todos los equipos a comenzar de cero, ya que excepto el motor cambia absolutamente todo.
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Mientras el monegasco comenzará su cuarta temporada como piloto oficial de Ferrari, el español iniciará su segundo año vestido de rojo tras un 2021 muy positivo y prometedor. Ahora, Mattia Binotto y su equipo deben darle a ambos un coche con el que devolver a la Scuderia a lo más alto tras dos años en los que el podio era un objetivo poco realista en la mayor parte de las carreras.
Motor nuevo
Si bien el reglamento
de motores permanece estable y la única novedad será la introducción de un periodo de congelación del desarrollo a partir del 28 de febrero, Ferrari ha querido renovar casi por completo su propulsor para volver a plantar cara a Mercedes en este sentido.
Así, el departamento de motores ha estado trabajando intensamente en los últimos meses para dar luz a un nuevo concepto de propulsor que se combine a la perfección con un coche que, a consecuencia del nuevo reglamento, utilizará el efecto suelo para generar carga aerodinámica y contará con ruedas de 18 pulgadas, una novedad en la Fórmula 1.
Aunque el coche tendrá mucho margen de mejora al ser completamente nuevo, los equipos no podrán gastar libremente, ya que este año el límite presupuestario instaurado en 2021 ha bajado incluso más, estableciéndose en 140 millones de dólares, menos de la mitad de lo que Mercedes o la propia Ferrari tenían de presupuesto en 2019.
