El nuevo Mazda CX-50 ya ha iniciado su andadura comercial al otro lado del Atlántico. La firma japonesa ha arrancado la producción de este nuevo, y muy atractivo SUV, creado especialmente para Estados Unidos. Un modelo para un mercado al que pretende conquistar con serios argumentos.
El nuevo Mazda CX-50 fue presentado el pasado otoño, un modelo que se perfila como un SUV más deportivo y espacioso, desarrollado especialmente para los exigentes clientes de Estados Unidos. Una seria apuesta con la que la marca de Hiroshima tiene el serio objetivo de conquistar a este público.
Argumentos no le faltan. A un diseño atractivo y sofisticado que refleja los valores de la filosofía «KODO», se unen un espacio interior cargado de tecnología por todos los costados, por lo que sin más demoras, el fabricante ya ha comenzado su producción en la factoría de Huntsville, Alabama, una sede que comparten Mazda y Toyota, capaz de producir nada menos que 300.000 unidades anuales. Una cifra que dice mucho de las pretensiones por hacerse con una importante cuota del mercado norteamericano, en la que el CX-50 es una nueva piedra angular.
El Mazda CX-50 llegará con opciones híbridas
Tal y como anunció en el debut del nuevo modelo, el fabricante japonés está cumpliendo a rajatabla los plazos marcados. Prácticamente a finales de enero, ha comenzado la producción para que el lanzamiento al mercado tampoco tenga retrasos, por lo que las primeras unidades llegarán a los clientes en primavera.
Un importante salto adelante que se materializa en un interior dominado por la tecnología más avanzada, destacando por un cuadro de instrumentos digital embutido en unos relojes más clásicos y una nueva pantalla táctil para el sistema de infoentretenimiento. El CX-50 se ofrecerá con una mecánica de gasolina «Skyactiv-G», en dos variantes del conocido motor de cuatro cilindros y 2.5 litros, una atmosférica y otra con turbo. Ambas con un cambio automático de 6 relaciones y con un sistema de tracción total electrónica, el «i-Activ», con tres modos de conducción.
Mazda ha aprovechado para confirmar que estas dos versiones mecánicas no serán las únicas, sino que tiene previsto ampliar la oferta en un futuro con opciones electrificadas. La marca hará uso de las diferentes alternativas que existen en el mercado, apuntando a la hibridación ligera de 48 Voltios y a un «híbrido tradicional», sugiriendo un sistema auto-recargable que puede heredar de Toyota.
