Sébastien Loeb logró alzarse con el triunfo en el Rally de Montecarlo al volante del Ford Puma Rally1. El francés sumó así su octogésima victoria en el Mundial de Rallies, firmando además el primer triunfo de la era híbrida del WRC. Sin duda, un escenario soñado por M-Sport, toda vez que el preparador de Cumbria ha vuelto a sacar partida a un cambio normativo dentro del certamen para dar vida a un vehículo ganador. Un coche con el que Craig Breen, Adrien Fourmaux y Gus Greensmith competirán a tiempo completo en 2022.
Mientras que los tres primeros Ford Puma tienen dueño, la cuarta unidad irá pasando por distintas manos a lo largo de la temporada. Lorenzo Bertelli competirá en el Rally de Suecia con este coche, mientras que Pierre-Louis Loubet estará a sus mandos hasta en siete citas del calendario. Con la calculadora en la mano, el cuarto Ford Puma todavía está libre en cuatro rallies, justo los mismos eventos en los que M-Sport quiere contar con Sébastien Loeb. Pese a todo, las negociaciones están todavía en plena evolución.
En este aspecto, Malcolm Wilson como director general de M-Sport no ha tenido problema en reconocer sus intenciones respecto al programa de Sébastien Loeb: «Cuatro pruebas es lo que pretendemos y eso es todo lo que puedo decir en este momento. Estamos trabajando en ello. Está claro que Suecia no va a ser una de ellas porque Lorenzo Bertelli estará en nuestro cuarto coche. Él mismo dijo que no a Croacia. Vamos a ver qué podemos hacer, pero tenemos muchas ganas de ver a Sébastien Loeb e Isabelle Galmiche de vuelta con nosotros».
El responsable de M-Sport ha añadido: «Lo que Séb hizo en Montecarlo fue impresionante. Cuando te sientas a pensar en todo, es aún mejor. Pensar que ha estado totalmente alejado de la competición durante un año, que venía del Rallye Dakar sin mucho tiempo en el coche y con una copiloto con la que nunca había competido en el WRC. Es sencillamente espectacular. Estuve a punto de fichar a Séb en 2005 y ahora puedo entender y ver lo que nos perdimos. Es algo muy especial».
Siguiendo con las buenas palabras hacia Seb, el patrón de M-Sport ha concluido: «Sólo fue necesario verle en los test para saber lo rápido que puede llegar a ser. Durante el rally las condiciones cambiaron un poco, pero Loeb no hizo ni un cambio en la puesta a punto del coche. Nada. Ni siquiera un clic en la suspensión. Y pese a todo fue rápido en todo momento. Eso es probablemente una de las cosas más impresionantes de él».
